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21 nov 2010




Pecados Capitales

¿Qué es el Pecado?

Vivimos en una cultura en la que el concepto de pecado se ha visto envuelto en discusiones legalistas sobre el bien y el mal. Para los griegos pecado se decía hamartia: ‘fallo de la meta, no dar en el blanco’. Aludía al concepto de vivir al margen de lo esencial debido a una actitud errónea no consciente. Antes que los griegos y con anterioridad al arameo el término pecado tenía el significado de ‘olvido’. Olvido de algo que estaba presente, "olvido" como dejar a un lado. No tener presente a algo o alguien que en ese momento, por diversas razones, se lo dejaba a un costado.

El concepto religioso aún vigente de pecado como ‘delito moral’ alude a la trasgresión voluntaria de normas o preceptos religiosos. Dado que existen innumerables normas de este tipo, existen innúmeros pecados, a los cuales se les asigna mayor, menor o ningún castigo según las distintas creencias.

En los estados confesionales, que tienen una "religión oficial", puede estar penado con la privación de libertad, e incluso de la vida, y en entornos culturalmente pobres, aun en sociedades modernas, se suelen achacar los problemas o accidentes físicos a la comisión de pecados.


Los 7 Pecados Capitales
Los pecados o vicios capitales son aquellos a los que la naturaleza humana caída está principalmente inclinada. Es por eso muy importante para todo el que desee avanzar en la santidad aprender a detectar estas tendencias en su propio corazón y examinarse sobre estos pecados.


El término "capital" no se refiere a la magnitud del pecado sino a que da origen a muchos otros pecados. De acuerdo a Santo Tomás “un vicio capital es aquel que tiene un fin excesivamente deseable de manera tal que en su deseo, un hombre comete muchos pecados todos los cuales se dice son originados en aquel vicio como su fuente principal”.


Lo que se desea o se rechaza en los pecados capitales puede ser material o espiritual, real o imaginario. “Pecados Capitales” (denominados así por ser “cabeza” o principio de todos los demás pecados) muestran claramente la cuna de todo lo moralmente reprobable. Esta codificación moral, que si bien fue formulada en el medioevo tiene una sorprende actualidad, está cruzada transversalmente por una problemática ética fundamental: la posibilidad de acoger hospitalariamente al “otro”, como una persona válida por sí misma.


La Soberbia.

Es el principal de los pecados capitales. Es la cabeza de “todos” los restantes pecados. Recordemos que por esta falta, según la teología cristiana, el hombre fue expulsado del jardín del paraíso. Es una ofensa directa contra Dios, en cuanto el pecador cree tener más poder y autoridad que Dios. En general es definida como “amor desordenado de sí mismo”. Según Santo Tomás la soberbia es “un apetito desordenado de la propia excelencia”.

La Pereza

Es el más “metafísico” de los Pecados Capitales en cuanto está referido a la incapacidad de aceptar y hacerse cargo de la existencia en cuanto tal. Es también el que más problemas causa en su denominación. La simple “pereza”, más aún el “ocio”, no parecen constituir una falta. Hemos preferido, por esto, el concepto de “acidia” o “acedía”. Tomado en sentido propio es una “tristeza de animo” que nos aparta de las obligaciones espirituales y divinas, a causa de los obstáculos y dificultades que en ellas se encuentran. Bajo el nombre de cosas espirituales y divinas se entiende todo lo que Dios nos prescribe para la consecución de la eterna salud (la salvación), como la práctica de las virtudes cristianas, la observación de los preceptos divinos, de los deberes de cada uno, los ejercicios de piedad y de religión.
Considerada en orden a los efectos que produce, si la acidia es tal que hace olvidar el bien necesario e indispensable a la salud eterna, descuidar notablemente las obligaciones y deberes o si llega a hacernos desear que no haya otra vida para vivir entregados impunemente a las pasiones, es sin duda pecado mortal.



La Lujuria
Es un apetito desordenado de los placeres eróticos. La tradición cristiana subdividió este pecado en la simple fornicación, el estupro, el rapto, el incesto, el sacrilegio, el adulterio, el pecado contra la naturaleza, comprendiendo bajo esta última especie, la polución voluntaria, la sodomía y la bestialidad. La lujuria sería siempre un “pecado mortal” pues involucra directamente la utilización del otro, del prójimo, como un medio y un objeto para la satisfacción de los placeres sexuales.

Hay en este pecado dos grandes principios en juego: el verdadero concepto del amor y la finalidad de la sexualidad. El cristianismo –y gran parte de la tradición clásica especialmente la griega–, entienden por “amor” algo muy distinto de lo que el mundo contemporáneo comprende.
El concepto de amor tiene una importancia central en el cristianismo. Para el cristiano el amor es “superabundancia”, capacidad de dar y de darse, “caritas”, en definitiva: caridad, una de las tres Virtudes Teologales. De esta manera el amor implica un donarse, un darse por el otro, por el prójimo. Recordemos la segunda parte del único mandamiento que anuncia el Nuevo Testamento: “...amar al prójimo como a sí mismo”. El amor cristiano, y también el griego, está, de esta forma, desligado en su origen de cualquier tipo de sexualidad, incluso de la corporeidad. Lo erótico es una consecuencia, un plus totalmente prescindible. La casi sinonimia entre amor y sexo es producto de la modernidad. El “hacer el amor” como sinónimo de “relación sexual” es el mejor ejemplo de lo anterior.

La Lujuria sería entonces totalmente contraria al amor y a Dios entendido en términos cristianos. El pecado de la lujuria no considera al otro como una “persona” válida y valiosa en sí misma, como un fin en sí misma por el cual tendríamos que darnos. El otro pasa a ser un objeto una cosa que satisface la más fuerte de las satisfacciones corporales, el placer sexual. Aun más, el sujeto mismo que incurre en un acto lujurioso se convierte a sí en un objeto, que olvida o suspende su propia dignidad.Por otro lado, para el pensamiento cristiano la sexualidad tiene una finalidad preestablecida, única y clara. La reproducción y la perpetuación de la especie. Esta clara finalidad da también sentido a la existencia del hombre ordenado su acción en vista del amor de Dios. La lujuria, en cambio, que no tiene en vistas la finalidad de la reproducción y que por esto pierde todo sentido, se convierte en una acción bacía, sin sentido, que de alguna manera nidifica al hombre y lo aleja del Ser de Dios.


La Avaricia.

La teología cristiana explica el pecado de la avaricia como “amor desordenado de las riquezas”, es desordenado, continua, “porque lícito es amar y desear las riquezas con fin honesto en el orden de la justicia y de la caridad, como por ejemplo, si se las desea para cooperar más eficazmente con al gloria de Dios, para socorrer al prójimo etc. El crimen de la avaricia no lo constituyen las riquezas o su posesión, sino el apego inmoderado a ellas; “esa pasión ardiente de adquirir o conservar lo que se posee, que no se detiene ante los medios injustos; esa economía sórdida que guarda los tesoros sin hacer uso de ellos aun para las causas más legítimas; ese afecto desordenado que se tiene a los bienes de la tierra, de donde resulta que todo se refiere a la plata, y no parece que se vive para otra cosa que para adquirirla.”

“La avaricia, por consiguiente, es pecado mortal siempre que el avaro ame de tal modo las riquezas y pegue su corazón a ellas que está dispuesto a ofender gravemente a Dios o a violar la justicia y la caridad debida al prójimo, o a sí mismo.”

En la avaricia se ven claramente los elementos comunes a todos los pecados. Por una lado, el avaro pierde el verdadero sentido de su acción poniendo el fin en lo que debería ser un medio, en este caso la obtención y la retención de las riquezas. Lo que importa al cristianismo es que el prójimo reciba, en justicia, la caridad que todos le debemos al menesteroso. La avaricia es directamente contraria a la caridad en cuanto es un “no dar”, más aun en privar a otros de sus bienes para tener más que retener. Por otro lado, el privar al otro de sus bienes, muchas veces con malas artes, y retener estos bienes en perjuicio del otro, es también negar al otro en su calidad de persona, de fin en sí. Se lo utiliza para satisfacer, mediante la acumulación de riquezas, el principio del amor a sí mismo.

Son faltas menores de la avaricia son: el fraude, el dolo, el perjurio, el robo y el hurto, la tacañería, la usura, etc.


La Gula.

“Uso inmoderado de los alimentos necesarios para la vida” es definido este pecado. La definición teológica se complementa con que “el placer o deleite que acompaña al uso de los alimentos, nada tiene de malo; al contrario, en el efecto de una providencia especial de Dios para que el hombre cumpliese más fácilmente con el deber de su propia conservación. Prohibido es, empero, comer y beber hasta saciarse por ese solo deleite que se experimenta”. De esta manera, la religiosidad latina especifica estas faltas en: proepropere: comer antes de tiempo o cuando se debe abstener de comer, por ejemplo en los días de ayuno señalados por la Iglesi; laute: cuando se comen manjares que superan las posibilidades económicas de la persona; nimis cuando se bebe o se come en perjuicio de la salud de la persona; ardenter: cuando se como con extrema voracidad o avidez a manera de las bestias. La gula se transforma en pecado en los siguientes casos:

La gula es la manifestación física de un apetito más profundo y significativo. El que cae en las tentaciones de la gula, no sólo quiere consumir comida. Quiere, de alguna manera, ingerir todo el universo. Asimilar, hacer suyo, todo lo exterior, reducir todo lo otro a sí mismo. En este sentido la gula se mimetiza estrechamente con la lujuria, se trata de ponerse por sobre lo otro, reducirlo, objetivarlo y hacerlo suyo. De esta manera el “glotón” se transforma en el único centro de referencia, en conformidad con el principio del amor a sí mismo. El asimilar, reducir, el universo en general y al prójimo en particular a sí mismo es la más radical negación del otro.


La Ira.

“Appetitus inordinatus vindictae” es decir, un “apetito desordenado de venganza”. En nosotros por alguna ofensa real o supuesta. Requiérase, por consiguiente, para que la ira sea pecado, que el apetito de venganza sea desordenado, es decir, contrario a la razón. Si no entraña este desorden no será imputado como pecado”. De esto ultimo se desprende que habría una ira “buena y laudable” si no excede los límites de una prudente moderación y tiene como fin suprimir el mal y reestablecer un bien.

“El apetito de venganza es desordenado o contrario a la razón, y por consiguiente la ira es pecado, cuando se desea el castigo al que no lo merece, o si se le desea mayor al merecido, o que se le infrinja sin observar el orden legítimo, o sin proponerse el fin debido que es la conservación de la justicia y la corrección del culpable. Hay también pecado en la aplicación de la venganza, aunque esta sea legítima, cuando uno se deja dominar por ciertos movimientos inmoderados de la pasión. De esta manera la ira se convierte en pecado gravísimo porque vulnera la caridad y la justicia. Son hijos de la Ira: el maquiavelismo, el clamor, la indignación, la contumelia, la blasfemia y la riña”.

De la definición anterior se desprende que la ira es el uso de una fuerza directa o verbal que trasgrede los límites de la legitima restitución de un bien ofendido. La violencia, entendida como el uso de la fuerza, si es desmedida, es claramente una anulación del otro. En el asesinato, por ejemplo, que no corresponde a la legítima defensa, se pretende evidentemente la nadificación del otro. En el leguaje, mediante la ofensa o el improperio, encontramos también el deseo de perjuicio e incluso de nulidad del otro.

Es importante hacer notar que el uso de la fuerza en contra del prójimo no siempre es un mal moral. Debe ser entendida como un mal menor si el fin por el cual se realiza no es sólo la anulación del otro sino que persigue fines legítimos como la conservación de la vida propia o de terceros. Tal es el caso de la “guerra legítima” que procura evita la propia muerte o la privación de la legítima libertad a mano de un invasor, la legítima defensa. El uso de la fuerza se justifica también cuando se procura, con esto, el bien del otro, evitando de esta manera un daño mayor que el dolor que se infringe.
La ira se convierte en pecado gravísimo cuando nuestro instinto de destrucción sobrepasa toda moderación racional y, desbordando todo límite dictado por una justa sentencia, se desea sólo la inexistencia del prójimo.

La Envidia

La envidia es definida como “Desagrado, pesar, tristeza, que se concibe en el ánimo, del bien ajeno, en cuanto este bien se mira como perjudicial a nuestros intereses o a nuestra gloria: tristia de bono alteriusin quantum est diminutivum propiae gloriae et excellentiae” De esta manera, para saber si la envidia es una falta moral, es necesario investigar el verdadero motivo que produce la tristeza que se siente frente al bien que posee el prójimo. De esta manera la envidia no es pecado cuando

La envidia es falta gravísima, cuando nos incomoda y angustia a tal grado el bien o los bienes materiales del otro, que deseamos verlo privado de aquellos bienes que legítimamente a conseguido y al que, nosotros, por nuestra impotencia, no hemos logrado conseguir. De esta manera, este deseo de ver privado al otro de sus bienes nos puede conducir a procurar, por todos los medios, a efectivamente quitarle esos bienes o de hacer ver, con el uso del chismorreo, que aquel no debería poseer lo que posee.
La mentira, la traición, la intriga, el oportunismo entre otras faltas se desprenden de esta tristeza frente al bien ajeno y a nuestra propia incapacidad de acceder a tales bienes.

16 nov 2010

El Rumor
La desinformación ha existido siempre, pero su utilización masiva a través de los medios de comunicación surge a consecuencia de la conflictividad creciente de los grupos humanos, y más concretamente a consecuencia de los procesos de cambio en una sociedad conservadora.

El punto de partida de la consideración, siempre cierta, de la necesidad de utilizar la información como arma, lo que inevitablemente trae consigo la necesidad de modificar la información en función de unos objetivos concretos de alguna de las partes del conflicto. Para que exista desinformación es necesaria una intención. Sin intención de desinformar no hay desinformación. Podría haber desidia, falta de información, carencia, pero nunca desinformación. Una información truncada o insuficiente, si es resultado de un proceso intencional, es siempre deformadora.
En la guerra psicológica, de gran importancia en todo tipo de conflicto, los adversarios recurren siempre a mecanismos desinformativos. A través de mensajes tratarán de provocar en el receptor cambios de opinión, de actitud o de actuación favorable al objetivo táctico o estratégico propio.
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Líderes de opinión
Un líder de opinión es aquella persona que habitualmente da su opinión con respecto a los temas de interés en la opinión pública, es así como su manera de pensar y de decir las cosas incide de alguna manera sobre el vox populi.
Tipos de liderazgo
• Líder tradicional
• Líder legítimo
• Líder carismático

Tres tipos de liderazgo que se refieren a formas variadas de autoridad:
• "Líder tradicional": es aquél que hereda el poder por costumbre o por un cargo importante, o que pertenece a un grupo familiar de élite que ha tenido el poder desde hace generaciones. Ejemplos: un reinado.
• Líder legítimo: Podríamos pensar en "líder legítimo" y "líder ilegítimo". El primero es aquella persona que adquiere el poder mediante procedimientos autorizados en las normas legales, mientras que el líder ilegítimo es el que adquiere su autoridad a través del uso de la ilegalidad. Al líder ilegítimo ni siquiera se le puede considerar líder, puesto que una de las características del liderazgo es precisamente la capacidad de convocar y convencer, así que un "liderazgo por medio de la fuerza" no es otra cosa que carencia del mismo. Es una contradicción per se.
Lo único que puede distinguir a un líder es que tenga seguidores: sin seguidores no hay líder.
• Líder carismático: es el que tiene la capacidad de generar entusiasmo. Es elegido como líder por su manera de dar entusiasmo a sus seguidores.
Formación de la Opinión Pública
La estabilidad y el cambio son dos aspectos opuestos de la opinión pública. La estabilidad se explica por la tendencia a amoldarse, que favorece la vida social y la educación. Supone que la opinión pública se mantiene igual y durante mucho tiempo. Los que se hallan en determinadas actitudes sociales no siempre las abandonan de buena gana. Hay resistencia a cambiar.
Sin embargo el cambio ocurre siempre y las actitudes y opiniones de hoy pueden no existir mañana. No siempre se llega a poseer una visión de cómo se producen los cambios en la opinión pública, pero ellos ocurren. Muchos factores actúan simultáneamente para producir esos cambios que, cuando son rápidos y muy compartidos, pueden producir verdaderos trastornos sociales.
Los hombres públicos conocen, más por apreciación de olfato que por apreciación técnico-científica, lo que es la opinión pública,, y de ahí la importancia que asignan a conocerla y seguirla en sus movimientos. En los regímenes democráticos, en donde obran libremente todos los actores de la comunicación, la opinión pública se convierte en un factor fluido y de constante renovación. Los regímenes dictatoriales, son contrario, producen siempre un modo uniforme y artificial de opinión pública, generalmente favorable a los gobernantes.
Sociedad Civil Organizada
Una organización no gubernamental (también conocida por siglas ONG) es una entidad de carácter público, con diferentes fines y objetivos humanitarios y sociales definidos por sus integrantes, creada independientemente por los gobiernos locales, regionales y nacionales, así como también de organismos internacionales.


Han existido aproximadamente desde el siglo XIX. Una de las más antiguas es la Cruz Roja, aunque propiamente no es una ONG por tener características particulares según sus estatutos y al ser consecuencia de Convenios Internacionales. El reconocimiento formal de las ONG es a partir del artículo 71 de la Carta de las Naciones Unidas (1945):
El Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas podrá hacer arreglos adecuados para celebrar consultas con organizaciones no gubernamentales que se ocupen de asuntos de competencia del Consejo.
Además de participar del sistema de las Naciones Unidas, también lo hacen a nivel de los Estados nacionales que correspondan en calidad de observadores, consultores, ejecutantes de proyectos, como una forma de presión social ciudadana, etc.
Desde entonces el Consejo Económico y Social ha pasado de 41 ONG reconocidas con el status de consultivas en 1946 a unas 2350 ONG (2003). Número mucho mayor si se incluyen a las que actúan sólo a nivel local y regional.
A nivel local pueden ser creadas para ayudar a los niños de la calle, alfabetización, superación de la pobreza, facilitar el acceso a vivienda y bienes, realizar investigación social, educación popular, defensa del medio ambiente, defensa de los derechos de los consumidores, ayuda social, promoción cultural, integración social, entre muchas otras.
Religiosos
Hasta el siglo XX, la perspectiva dominante sobre el origen de la experiencia religiosa la sitúa en el sentimiento de espanto o miedo ante lo desconocido o aquello que escapa a una explicación racional.
Los diversos cultos religiosos que se practican en México han dado origen a 6 mil 289 asociaciones religiosas, de acuerdo con los registros de la Secretaría de Gobernación, en los cuales se conforma un universo de la fe en México en el que sólo 27 agrupaciones confesionales tienen credos distintos al cristianismo.
Católicos, ortodoxos, protestantes, evangélicos y cristianos bíblicos que guardan los días de esta semana, integran el núcleo de las prácticas de fe en el país.
En tanto, también bajo la protección de la legislación desarrollan sus tareas de culto asociaciones religiosas judías, islámicas, hinduistas, budistas y krishnas, de acuerdo con el informe anual de la Dirección General de Asociaciones Religiosas.
En lo particular, la Iglesia católica tiene el mayor número de registros al alcanzar los 2 mil 958; le siguen las asociaciones evangélicas Pentecostés, con mil 563 asociaciones, en tanto que hay mil 559 agrupaciones bautistas.
En su evolución histórica, algunas religiones se irán sofisticando para observar nociones de pureza de cuerpo y espíritu que irán desterrando la alteración de la psique mediante sustancias externas. Las sustituirán los rituales, oraciones, y técnicas contemplativas que se convertirán en los facilitadores de la experiencia religiosa. Esta evolución, unida al triunfo o colapso de las diferentes civilizaciones que las acogen, y a la presión del medio social en el que se desenvuelven, explicará en buena medida el futuro de las distintas religiones.
Organizaciones e instituciones políticas
Las instituciones son mecanismos de orden social y cooperación que procuran normalizar el comportamiento de un grupo de individuos (que puede ser reducido o coincidir con una sociedad entera). Las instituciones en dicho sentido trascienden las voluntades individuales al identificarse con la imposición de un propósito en teoría considerado como un bien social, es decir: normal para ése grupo. Su mecanismo de funcionamiento varía ampliamente en cada caso, aunque se destaca la elaboración de numerosas reglas o normas que suelen ser poco flexibles.
El término institución se aplica por lo general a las normas de conducta y costumbres consideradas importantes para una sociedad, como las particulares organizaciones formales de gobierno y servicio público. Como estructuras y mecanismos de orden social en la especie humana, las instituciones son uno de los principales objetos de estudio en las ciencias sociales, como la antropología, la sociología, la ciencia política, la economía y la Administración entre otras.
Instituciones normas
También llamadas Instituciones cosas, o instituciones mecanismos; consisten en componentes ideales de una entidad, como por ejemplo un Reglamento, Código, o una Constitución. Todas ellas, con el carácter de permanentes, pues siguen existiendo a pesar de que las voluntades creadoras de estas entidades han fallecido.



Instituciones políticas
Son aquellas que se refieren a la sociedad política, y que regulan la estructura y órganos del gobierno del estado.1 Según el criterio presentado por la Unesco en 1948, referente a los objetos de estudio de la ciencia política, las instituciones políticas tienen relación con los siguientes conceptos:
• a) Constitución
• b) Gobierno central
• c) Gobierno regional y Gobierno local (instituciones municipales o ayuntamientos).
Determinantes de la
Opinión Pública

LOS GRUPOS SOCIALES

Orígenes.

Los orígenes del grupo social sé remota a los tiempos de la prehistoria, cuando el hombre sintió la necesidad de agruparse, para enfrentarse a los problemas que a diarios confrontan.
La primera forma de agrupación humana recibió el nombre de hordas primitivas, que luego con el desarrollo del hombre fue ampliándose hasta llegar a las tribus, producto del desarrollo que alcanzó la sociedad.

*Grupo primario: un grupo pequeño, en el que sus miembros se relacionan directamente “cara a cara”.
Ejemplo: la familia, los grupos de amigos, compañeros de clases, etc.
Características.
1- Es un grupo pequeño, varia con la edad y madurez de sus miembros, no debe pasar de los 50, lo ideal es que sea de 15 a 20 personas. A medida que el grupo es mayor, disminuye la confianza y la intimidad.
2- Comunicación “cara a cara”: los miembros se relacionan directamente y se conocen unos a otros.
3- Relación espontánea.
4- Frecuencia en las relaciones.
5- Compartir normas, valores e ideales comunes.


*Grupo secundario: son grupos más grandes en los que sus miembros mantienen contactos impersonales y utilitarios.
Características.
1- Es un grupo grande.
2- Sus miembros se relacionan de un modo impersonal.
3- Las relaciones son superficiales.
4- Buscan la relación de ciertos intereses comunes, lucrativos o no.
Ejemplo de un grupo secundario.
Es un sindicato, un partido político, etc.
Para diferenciar el grupo primario del secundario decimos que:
-En los grupos primarios convivimos.
-En los grupos secundarios compartimos.
Tanto los primarios como los secundarios pueden ser.
• Naturales: que son la familia, la religión, la nación, etc.
• Convencionales: que son club social, grupo de amistad y todas las asociaciones voluntarias.
• Mixtos: Participa de las dos clases anteriores

10 oct 2010

Consideraciones éticas en torno al tema ecológico y la biodiversidad, uso y mal uso de la tecnología

Durante el coloquio denominado: valores para la sociedad contemporánea, ¿en que pueden creer los que no creen?,  la cual se llevo  acabo en el centro cultural  universitario, se realizaron diecisiete  temas de discusión en donde se reunieron entre otros: José María  Pérez Gay, Luis Villoro, Miguel León Portilla, Julieta Fierro y Juan Ramón de la Fuente entre muchos mas, dentro de estas  discusiones se trataron  temas de  suma importancia  para los nuevos tiempos que estamos viviendo, entre estos temas  se hablo de: psicoanálisis y filosofía existencialista, Nietzsche, Dostoievski y el Marxismo  y Cosmología   entre muchas otras que  tuvieron lugar en este coloquio.

En el marco del  ultimo día  de este coloquio se  pudo apreciar  el debate  denominado: consideraciones éticas en torno  al tema ecológico  y la biodiversidad, uso  y  mal  uso de la tecnología, los ponentes fueron   Tila María Pérez,  Víctor Manuel Castaño Y Jorge Linares  expusieron   tres visiones  distintas del mismo problema.




Maestra Tila María Pérez




En  primer término  la maestra Tila María Pérez  comento  como  en nuestro país existe una gran biodiversidad en la cual  los  propios mexicanos no conocemos,  además de  destacar que  se necesita una culturalización  de muestro propio medio ambiente, además de que  pidió  que se reflexionara en  cuanto a que  existieran mas planes y programas de difusión para  que los jóvenes  protejan sus recursos naturales.

Víctor Manuel Castaño


Él segundo  ponente  Víctor Manuel Castaño hablo de  su trabajo como  profesor en la universidad de puebla donde   en seña a jóvenes los recursos  de nano tecnología  la cual expuso es una de las armas mas poderosas que  de que se dependerá el ser humano para rescatar  nuestro medio ambiente y también demostró que  mediante estos recursos  se pude  crear un registro para no perder mas  ecosistemas.

Jorge Linares 



Y por su parte Jorge Linares   también planteo  como  gracias al ser humano el ecosistema  ha ido cambiando  y el cambio climático se ha  vuelto más  evidente con fenómenos como el niño y la niña, también  mostro un  conjunto de fotos donde demostraba  el cambio que ha  ido acrecentándose en lugares  donde  la  mano del hombre y su interés  en los recursos naturales ha puesto  su  mira, dejando  con esto  pensando a los asistentes de cómo  ayudar a crear una estabilidad en este mundo y como ayudar a crear conciencia  en este  tema tan importante.

Este tema es  importante ya que hasta el momento las leyes  y sistemas que rigen el cuidado del medio ambiente no han sido suficientes así como  tampoco lo han sido  la educación y  las responsabilidades que las autoridades y los padres han dejado  a el futuro de México  su juventud.

Línea del Tiempo

EDAD ANTIGUA

• GRECIA:


El sentido de la o.p. es filosófico. Se empieza a dar importancia a la opinión del pueblo.
• Planteamiento de Platón y Aristóteles. Concepto de la doxa (opinión), episteme (ciencia), como vías para acceder a la aletheia (verdad) y a la areté (perfección).
• Platón: opinión como algo denigrante, un semisaber, algo perteneciente al vulgo. Conocimiento inseguro, basado en impresiones y ambigüedades. Es algo no muy positivo. Para él lo ideal es la ciencia. A pesar de esta concepción, dice que en algunos casos la doxa debe ser tenida en cuenta por los hombres de estado, sólo en algunos casos, cuando hay descontento del pueblo.
• Aristóteles: la doxa es un conocimiento aproximado, probable, con lo cual si podemos acercarnos a la verdad. Defiende al hombre como un ser vivo capaz de hablar (en Atenas hablar era formar parte de la vida pública).
EDAD MEDIA


Época marcada por el espíritu católico donde parece que la ley está por encima de todo, basada en los usos, costumbres y/o consentimiento popular que requiere la vida de los pueblos. El pensamiento dominante está en la autoridad de Dios, para justificar todo tipo de poderes al ser utilizada por emperadores y autoridades religiosas:
LEY NATURAL (civil) - emperadores - srs. Feudales - súbdito
DIOS-LEY ETERNA
LEY DIVINA (religión) - papas - obispos - fieles
Ante este panorama los fieles y los súbditos no tienen casi posibilidad de hablar, es un pueblo obediente, pasivo
No habiendo derecho a expresarse, a discutir y a disentir, son los tres derechos básicos para que exista la o.p., puede hablarse a priori de que no hay o.p.
JUAN DE SALISBURY, JUAN DE PARÍS Y STO. TOMÁS DE AQUINO abren la puerta a la idea de que la soberanía reside en último lugar en el pueblo. Sobre todo J. De Salisbury, proclama que si el rey no actúa conforme a los requerimientos del pueblo, el pueblo puede llegar a acabar con la vida del monarca. Si no se actúa conforme a los intereses del pueblo, el rey está sujeta a la Ley Natural, si la viola, el pueblo tiene la potestad de acabar con él: Licitud de Tiranicidio.
Para que realmente se avance en la o.p. hay que pasar de una sociedad sacralizada a otra socializada. Que es el resultado de transformaciones sociales, económicas, políticas, tecnológicas y mentales. Es importante, sobre todo, los cambios de mentalidad, que son los que hacen posible la creación de ciudades y la derrota de la doble autoridad (iglesia/emperador).
En el ámbito político los gobernantes empiezan a ser conscientes de que necesitaba al pueblo. La reputación va a ser un elemento importante para la opinión. Los intelectuales empiezan a tener en cuenta la opinión y van dejando de tener un enfoque negativo de la misma.

1457: Invención de la IMPRENTA. Difusión de ideas. Opinión individual. Se pueden desarrollar ideas por el acceso a la información.
Desarrollo comercial de las ciudades. Nueva clase social: BURGUESÍA (s. XVII - XVIII), juegan un gran papel en lo económico les permite acceder al ámbito cultural que estaba cerrado a la aristocracia. Se va a intentar acabar con los problemas culturales, la burguesía va a emprender campañas de alfabetización, quiere el poder político, comienza a enfrentarse al orden medieval establecido.
• Centros de discusión literaria en principio que se convierten en discusión política, son los salones franceses, cafés ingleses, sociedades alemanas. Se discuten cuestiones de carácter general con la relevancia que tengan y en el sentido de la accesibilidad, todos podía entender de ello.
• LOCKE, S. XVII
Habla de 3 leyes: Divina, Estatal y de la Opinión (o del vicio o la virtud, ley de la reputación, de la moda...) relacionado con el concepto romano, El Príncipe de Maquiavelo.
Ensayo sobre el entendimiento humano. Ley de la opinión: conjunto de costumbres que actúa sobre un grupo para que no se salga de lo establecido: concepto de Vox Populi: Clima de Opinión de Glanwill: Elisabeth Noelle Newman.
• MONTESQUIEU, s. XVII - XVIII
El estudio de las leyes: estudio comparativo de las tres formas de gobierno: república, monarquía y despotismo. Hace referencia a la separación de poderes.
• HUME
Tratado de la naturaleza humana: recoge las ideas aportadas por Locke y las convierte en teoría del estado. Parte de la idea de que la gente tiende naturalmente a prestar atención a las o.p. y amoldarse a ellas, la opinión tiene que ser, entonces, esencial para los asuntos del estado. “el gobierno sólo se basa en las opiniones”. Hay una diferencia importante con Locke. Para Locke la presión que ejerce la o.p. la dirige a un ámbito individual y Hume dice que ejerce la presión sobre los gobiernos.
• ROUSSEAU
Está relacionado con la utilización de la expresión de o.p. y tiene una obra El contrato social donde se habla de la “voluntad general” muy relacionada con la o.p.
Utilización de la expresión O.P. por primera vez en 1750. Cuando se presentó al premio de la Academia de Dijon con su “Discurso sobre las ciencias y las artes”. Un estudio llevado a cabo por Noelle Newman dice que Rousseau había utilizado ya el concepto en 1744, estando en Venecia, en una carta dirigida el 2 de mayo al secretario del embajador francés, recogida en la Obra Despacho desde Venecia. En 1984 un estudiante de N. N. encuentra un nuevo dato, se llama Michel Raffel, en su tesis de licenciatura: en 1588 un personaje llamado Michel de Montaigne utiliza la expresión de o.p. en una obra llamada Ensayos. Justifica la utilización de citas en esa obra de la antigüedad clásica y dice que “es en atención a la o.p. que hace uso de esas citas”. Se hace referencia al concepto de la opinión espontánea, común del pueblo.
• MADISON
1788, El federalista: intenta investigar sobre las implicaciones de que todo gobierno se basa en la opinión (Hume).
• TOCQUEVILLE
Para N. N. es el primer intelectual que trata la idea de la Teoría de la Espiral del Silencio.
John Millton: hace defensa de la libertad de expresión en el s. XVII
Una serie de textos, cuestiones puntuales recogidas en documentos que demuestran la existencia de esos cambio.
Durante el siglo XVIII español, el concepto de opinión pública equivalía a “opinión de la multitud”, normalmente expresada a través de una reunión masiva. A finales de este siglo, sin embargo, empieza a adquirir connotaciones cualitativas y adquiere las notas propias que le otorgaría el liberalismo, como instrumento de guía y control del gobernante.
El liberalismo progresista posterior añadió la idea de que sólo los ciudadanos activos, aquellos que participaban en política, expresaban la verdadera opinión pública, que se transmitía a través del ejercicio de libertades naturales y que sólo limitaba al Ejecutivo a través de la responsabilidad moral. Conviene recordar que en aquellos tiempos sólo se consideraban ciudadanos (con derecho a participar en asuntos políticos) las minorías gobernantes o dominantes de las naciones occidentales o colonias.
Se podría alegar que esa concepción correspondía a la del despotismo ilustrado y se refleja en dichos comunes en esa época: "todo para el pueblo pero por el pueblo, nada" ( José II) "La mejor forma de gobierno es la que nos enseña a gobernarnos (en el sentido de controlarnos) a nosotros mismos" (Goethe) y ¡razonad tanto como queráis y sobre lo que queráis, pero obedeced! (Kant).
El liberalismo moderado, sin embargo, modificó el concepto de opinión pública relacionándola a los "ciudadanos instruidos", distinguiendo entre opinión legal (expresada por el Parlamento) y natural (derivada de los ciudadanos). Una opinión que sólo podía manifestarse a través de medios jurídicos reglados: la libertad de prensa, el derecho de petición y el sufragio. Esto, por un lado, la restringió: el número de ciudadanos instruidos era muy bajo; y por el otro la extendió: para ser instruido no era requisito ser noble o miembro de las clases gobernantes. Esta reformulación coincide con la visión de los teóricos de la democracia liberal clásica (Rousseau, Locke, Tocqueville)

REVOLUCIÓN FRANCESA:
Existen dos ámbitos de tensión:
• conflictos entre estamentos (nobleza, clero y tercer estado)
• crisis económica, déficit que supone la imposición de impuestos que pagan los menos adinerados.
Lo que propicia la toma de la Bastilla el 14 de Julio de 1789 fue el enfrentamiento al estado de las dos cuestiones anteriores, de una ideología: la ilustración, y de la clase privilegiada y la burguesa.
ILUSTRACIÓN: Forma importante de pensamiento que ejerce una crítica a lo que ocurre y a través del cual se dan consignas de igualdad y libertad. Voltaire.
NOBLEZA: las ideas de la Ilustración hacen huella también en la nobleza
1791: Declaración de derechos del hombre y del ciudadano: se recogen principios como igualdad, libertad, propiedad, soberanía, separación de poderes, libertad de expresión y opinión.
1793: Declaración de derechos: se recogen los derechos anteriores y se amplían. Inclusión de una idea apreciada por los liberales: acceso de todos a la educación.
Con el surgimiento de la cultura de masas y la expansión técnica, productiva del modelo fordista y expansión de la burocracia, comienza un progresivo ensanchamiento del término hasta que a fines del siglo XX el ciudadano es la población misma, ahora transformado en "el público".
REVOLUCIÓN INDUSTRIAL
Fue precisamente en el periodo del desarrollo industrial más activo cuando empeoraron las condiciones de vida del trabajador. La duración del trabajo se alargó desmesuradamente; la ocupación de mujeres y niños en las fábricas hizo descender los salarios; la aguda competencia entre los mismos trabajadores que ya no estaban ligados a sus parroquias, sino que viajaban libremente y podían reunirse allí donde la demanda de sus servicios era mayor, abarató todavía más el trabajo que ofrecían en el mercado: crisis industriales numerosas y frecuentes –inevitables en un período de crecimiento, cuando la población y el consumo no se han estabilizado todavía- incrementaban de tiempo en tiempo la multitud de parados, el ejército de reserva de hambre.

Revolucion Industrial

Revolución Industrial
Opinión publica
Se conoce como Revolución Industrial al cambio en la forma de producción manual por la mecánica. Este movimiento se inició en Inglaterra hacia mediados del siglo XVIII, cuando se reunieron las condiciones que hicieron posible: ser el primer país en modernizar su agricultura y ganadería, impulsar a través del sistema colonial, lo que ayudó a aumentar sus capitales.


Fue el resultado de múltiples cambios sucedidos en Europa. En la economía, se eliminaron las formas feudales de producción agrícola, lo cual estimuló enormemente el comercio y la industria. El capitalismo se fortaleció con la acumulación de capital, producto del desarrollo del comercio mundial y de la explotación colonial.



En el ámbito social, se estableció una sociedad de hombres libres; se concentró la población en las ciudades y se consolidó la burguesía, promotora de grandes cambios económicos y políticos.
Fue precisamente en el periodo del desarrollo industrial más activo cuando empeoraron las condiciones de vida del trabajador. La duración del trabajo se alargó desmesuradamente; la ocupación de mujeres y niños en las fábricas hizo descender los salarios; la aguda competencia entre los mismos trabajadores que ya no estaban ligados a sus parroquias, sino que viajaban libremente y podían reunirse allí donde la demanda de sus servicios era mayor, abarató todavía más el trabajo que ofrecían en el mercado: crisis industriales numerosas y frecuentes inevitables en un período de crecimiento, cuando la población y el consumo no se han estabilizado todavía- incrementaban de tiempo en tiempo la multitud de parados, el ejército de reserva de hambre
Durante la primera mitad del siglo XIX, la Iglesia católica comenzó a manifestar su preocupación frente a la presencia de un proletariado empobrecido y en constante aumento. La Iglesia, adopta soluciones que pasaban por la caridad. En Francia, por ejemplo, fue creada la Sociedad de Moral Cristiana, de la que surgieron numerosas instituciones cajas de ahorro y sociedades de socorros mutuos. La Sociedad tenía un comité para el perfeccionamiento moral de los presos y otro para la ubicación de éstos.


Hacia el final del siglo XVIII, las ideas renacentistas habían llegado a todos los ámbitos de la actividad humana, y la economía no podía ser ajena a los anhelos de libertad, en contra del orden feudal, con el absolutismo de los reyes y la Iglesia, donde todo estaba reglamentado de tal forma que se obstaculizaba la libertad económica y de pensamiento.



Desde el comienzo de la escuela clásica con Adam Smith, David Ricardo y otros defenderán el régimen de opinión frente al despotismo. Cada uno de sus representantes aportaría elementos favorables para el desarrollo de las libertades individuales, entre ellas las de opinión. Frente a este planteamiento se eleva la concepción marxista. Para Marx y Engels, no existe una opinión pública general que nace en la sociedad civil, sino una opinión que pertenece a la clase dominante. Por ello, para el marxismo la ‘falsa conciencia’ se condensaría en la opinión pública oficial.


La opinión pública como tal ha contribuido con el paso del tiempo a fortalecer la democracia, en este siglo se representaba por la clase burguesa que menospreciaba la clase de proletariado en la política y economía.

Platón y Aristóteles desarrollaron desde la filosofía y con una perspectiva muy distinta a la de los liberales el concepto de Opinión Pública (DOXA).
Platón desde su mentalidad elitista y aristocrática de la sociedad distingue el plano del conocimiento la vía de la opinión (doxa) de la vía de la ciencia (episteme) como formas de acceder a la verdad y la percepción humana.


 
Aristóteles


Verdad libertades públicas


Grecia


Democracia Opinión Pública

 
Polibio: Opinión pública es cíclica
Patrón Patriarcal
Opinión Pública: era la vía por la cual se podía acceder al conocimiento y concepción de algún pensamiento acerca de la mentalidad de esa época, se caracterizaba por ser elitista.



Edad Media: tras la caída del Imperio Romano la influencia de los pueblos germánicos traerá nuevas ideas sobre el derecho y el gobierno, arrinconando viejos conceptos relativos a las influencias entre esfera privada y esfera pública.

 
Tomás de Aquino alaba la monarquía, ataca la tiranía y reconoce ciertos poderes en el pueblo cuando el gobierno es elegido democráticamente. En Juan Pablo de París, aflora la influencia secularizadora de la época, defendiendo la separación entre la autoridad espiritual y secular y apoya en consenso popular como fundamento del poder político.





Opinión Pública en Edad Media
Se transforma un poco, se vuelve un poco más liberal abarcando temas políticos y sobre el derecho.

8 sept 2010

OPINION PUBLICA

Los individuos tienen un sentido  perceptivo  de la evaluación  del ambiente ideológico,  de los modos  de opinión  y de los valores  que constituyen  valores mayoritarios.



Los movimientos de adhesión  a las grandes corrientes  de opinión  son un acto reflejo  del sentido protector  que confiere  la mayoría  y el rechazo al aislamiento, al silencio y la exclusión.



                               Noelle - Neuman